Congreso de Juan Gil-Albert en
Alicante y Alcoy
Ramón
Fernández Palmeral
Durante la primera semana del mes de abril
se celebrará el Congreso Internacional dedicado
a realzar la figura del escritor y poeta Juan Gil-Albert del 3 al 6 de abril de
2019, en
Alicante y Alcoy. Inaugurado por el poeta valenciano Francisco Brines, y con la conferencia inaugural del
poeta madrileño Luis Antonio de Villena, de grupo de los novísimo o
venecianos, con la participación de expertos «gilabertianos» con ponencias y
comunicaciones en la Sala Bardín y en la Sala Miguel Hernández de la Sede
Universitaria de Alicante.
Tras la apertura por el poeta Francisco Brines (Real Academia de la Lengua), se estrenará la composición musical Nocturno, de Miguel Brotons a cargo de la Pilar Moral, soprano, y Pere Joan Carrascosa, al violonchelo, ambos del Conservatorio Superior de Música Óscar Esplá de Alicante y dará comienzo el Congreso con la conferencia inaugural, "Gil-Albert, escritor esquisito y total", a cargo del escritor Luis Antonio de Villena. Villena fue en los años setenta uno de los autores jóvenes que reconocieron al escritor alcoyano como uno de sus antecedentes literarios y publicó además un libro de conversaciones con Juan Gil-Albert.
Tras la apertura por el poeta Francisco Brines (Real Academia de la Lengua), se estrenará la composición musical Nocturno, de Miguel Brotons a cargo de la Pilar Moral, soprano, y Pere Joan Carrascosa, al violonchelo, ambos del Conservatorio Superior de Música Óscar Esplá de Alicante y dará comienzo el Congreso con la conferencia inaugural, "Gil-Albert, escritor esquisito y total", a cargo del escritor Luis Antonio de Villena. Villena fue en los años setenta uno de los autores jóvenes que reconocieron al escritor alcoyano como uno de sus antecedentes literarios y publicó además un libro de conversaciones con Juan Gil-Albert.
Seguidamente expongo unos datos superficiales y de su biografía, y
de su poesía homoerótica reprimida, latente en “Misteriosa presente”. Destaca una presencia misteriosa de su yo
lírico controvertido para su época, con el tema, como el de la homosexualidad,
que ha dejado de ser tabú en la literatura española actual. Así como sus
amistades durante la II República, Guerra Civil y exilio.
Nació en Alcoy
Por la partida de nacimiento sabemos que Juan de Mata Gil Simón nació el 1 de
abril de 1904, en la calle General Polavieja nº 17 (hoy calle San Lorenzo) de
Alcoy (Alicante), era hijo de Ricardo Gil Albert, empresario en la rama de la
ferretería natural de Ibi y de Vicenta Simón Belenguer que procedía
de una familia burguesa mercantil valenciana. Nieto por línea paterna de José
Gil Torres y de María Albert Rico, y por línea materna de Manuel Simón Aparicio
y de Vicente Belenguer Llorens.
Ricardo y Vicenta tuvieron tres hijos: Juan,
Vicenta (llamada Tina por el diminutivo de Vicentina), y también le llamaba Laura, en alusión al amor platónico de
Petrarca, y la tercera Elena fallecida a la que llamaba Perséfone.
Desdeñó
el apellido de su madre Simón La fascinación de lo irreal (1927), y
se agregó el segundo de su padre Albert llamándose Juan Gil-Albert con el
famoso guión de unión paternal que no umbilical. En 1928 conoció en Madrid al
Gabriel Miró el autor de Años y leguas,
de quien escribió después su entrevista titulada “Gabriel Miró: (El escritor y el hombre)”. Valencia: [s.n.],
1931, y “Gabriel Miró:
Remembranza”, Biblioteca de Nuestro Mundo, 1980.
La Segunda República
Por convicción, a pesar de ser de origen burgués, Gil-Albert
abandonó los estudios de Derecho y de Filosofía y Letras en Valencia, con
gran disgusto de sus padres, para ser escritor en exclusiva, y tomó partido por
la II República, primero en Valencia donde conoció a un grupo de tres
jóvenes comunistas en la revista “Nueva
Cultura”, su primera obra poética es “Candente Horror” surrealista. “Misteriosa presencia” no era su primera obra poética como
parecen en todas la bibliografías de Juan Gil-Albert, se trata de un poemario
de sonetos de literatura homosexual según el profesor Alfonso Martínez de la Universidad de Queenslands, poemario
publicado el 4 mayo de 1936 en Edición Héroe de la imprenta de Manuel
Altolaguirre de Madrid. “Candente
horror” es una protesta enérgica de sus experiencia vitales compuesta durante
los años 1934 y 35 (Revolución de Asturias), se publicó como separata de
la revista “Nueva Cultura” en
febrero de 1936, era una revista
antifascista, procedente de la Unión de Escritores y Artistas Proletario de
Valencia (enero1935- octubre 1937), editada en Valencia, dirigida y
fundada por el pintor Josep Renau
Berenguer, y auxiliado por Juan Miguel Romá, José Bueno y Ángel Gaos,
que también publicaba artículos, o Juan Renau, hermano del primero. En el
número III-I, 1937, publicó Gil-Albert «El poeta como juglar de guerra» sobre
la poesía del compromiso de luchar contra el fascismo.
Gil-Albert trastocó, adrede, el orden cronológico de sus primeras obras poéticas, y las ordenó
primero “Misteriosa presencia” y segundo “Candente horror”, cuando,
como ya se ha dicho, la primera se publicó el 4 de mayo de 1936, y la segunda
en febrero de 1936. Así pretendía inscribirse son sus 34 sonetos en
la nómina de la los poetas gongorinos de la generación 27, de haberlo logrado
hubiera sido más famoso, aunque su primera obra en prosa fue de 1927, y lo pudo
ser, pero ha quedad inscrito en la generación del 36, junto a Miguel Hernández,
Luis Rosales, Leopoldo Panero y Luis Felipe Vivanco entre otros.
En los
primeros meses de 1936 conoció en Madrid a Juan Ramón Jiménez, José Bergamín, Luis Cernuda, Federico García Lorca,
Manuel Altolaguirre, Concha Méndez, Pablo Neruda, María Zambrano y Miguel
Hernández (quien le dedicó su “El rayo que no cesa” en abril de 1936); y
mantiene la amistad con Antonio Sánchez
Barbudo y sobre todo con Ramón
Gaya.
Guerra Civil y el II Congreso
Durante la Guerra Civil su poesía se convierte combativa, lo que se ha
denominado también de compromiso, poesía urgente o de guerra, publicó “Siete Romances de guerra” que luego
modificó el título por “Romance
valenciano del Cuartel de Caballería” (según Manuel Parra (Auca,
2013-19), “Son nombres ignorados” 1938
con el que ganó el Premio Nacional de Poesía,
que le fue retirado. Fundó y perteneció al consejo redactor de la
revista mensual “Hora de España”,
de Valencia, gracias a las reuniones que tuvieron en casa de Juan
Gil-Albert con intelectuales como Rafael Dieste, Moreno Villa, León Felipe,
Arturo Serrano Plaja y otras importantes figuras de la época. La
financió Carlos Esplá, que era entonces titular del Ministerio de Propaganda.
La idea de crear la revista fue de Rafael Dieste y el título lo puso Moreno
Villa (Pedro García Cueto, “Juan
Gil-Albert y el exilio español en México”, 2016).
A la redacción de “Hora de
España” se incorporó la filósofa veleña María Zambrano (quien a los ocho
meses de iniciarse la guerra regresó desde Chile junto a su marido el
diplomático Alfonso Rodríguez Aldave para ayudar a la causa republicana el 19
de junio de 1937). A partir del número XIII, en Barcelona, Gil-Albert se
convertirá en el secretario de la revista hasta el número XXIII en que dejó de
editarse
En
el II Congreso Internacional de Escritores para Defensa de la Cultura celebrado
del 4 al 17 de julio de 1937 en el salón de actos del Ayuntamiento de Valencia,
participó como secretario y también en la “Ponencia colectiva” con Antonio Sánchez Barbudo, Ángel Gaos,
Antonio Aparicio, Arturo Souto, Emilio Prados, Eduardo Vicente, Juan
Gil-Albert, José Herrera Petere, Lorenzo Varela, Miguel Hernández, Miguel
Prieto, Ramón Gaya A. Serrano Plaja, que fue leída por este último.
Exilio, regreso y premios
Antes
de terminar la guerra le llegó el obligado exilio a Francia, México, Buenos
Aires, y retorno a México, y regresó a España en agosto de 1947 primero a su
casa Villa Vicente de El Salt, y luego en Valencia donde pasó unos 30 años en
lo que se conoce como exilio interior, es a partir de 1974 cuando es reconocido
como un gran poeta y escritor por los jóvenes poetas levantinos y le llegan los
premios y reconocimientos, como dar su nombre en 1984 al hoy el Instituto Alicantino de Cultura Juan
Gil-Albert.
Los premios comienzan según José Ferrándiz
Lozano, con el premio del periódico “Ciudad”
de Alcoy le distinguió con el Premio Peladilla de Oro en 1978; en 1982,
el mismo año en que se le concedía el Premio de las Letras Valencianas, el
Ayuntamiento de Valencia le declaraba Hijo Adoptivo; un año después su ciudad
natal le concedía nuevos honores con la Medalla de Oro y el nombramiento como
Hijo Predilecto; en 1985 la Universidad de Alicante le investía Doctor
honoris-causa; y en enero de 1986, tras constituirse el Consell Valencià de
Cultura, fue elegido como su primer presidente. Entretanto, la Institución
Alfonso el Magnànim, de la Diputación de Valencia, editaba su obra completa en
varios volúmenes desde 1981, mientras que en 1984 la Diputación provincial de
Alicante adoptaba una decisión que, a la larga, ha mantenido su nombre en los
ambientes culturales y académicos: la decisión de sustituir la denominación del
Instituto de Estudios Alicantinos (IEA). En 1986 fue nombrado
presidente del Consell de Cultura de la Generalitat Valenciana. También es Hijo
Predilecto de Alcoy.
Fallece Juan Gil-Albert en Valencia
en 4 de julio de 1994 a los 90 años.